miércoles, 19 de noviembre de 2014

BIZCOCHO DE NUECES

BIZCOCHO DE NUECES

Ingredientes

350 g de harina
200 g de azúcar
1 sobre de levadura Royal
2 huevos
250 ml de leche entera
100 g de nueces enteras
1 cucharada de canela
100 g de mantequilla




1 pellizco de sal

Preparación del bizcocho

  1. En un bol grande batimos los huevos con el azúcar hasta que salga una pequeña espuma y cuando ya estén así añadiremos la leche (mejor que sea entera).
  2. Mezclamos la levadura con la harina y la echamos al bol anterior, volvemos a batir. Dejamos reposar 10 minutos.
  3. En el mismo bol echamos la ralladura de medio limón, un pellizco de sal, media cucharada de café soluble y la mantequilla líquida. Batimos todo hasta que no queden grumos.
  4. Vertemos la mezcla anterior en un recipiente engrasado con mantequilla y espolvoreado con harina. Justo antes de meterlo en el horno añadimos con una cuchara las nueces (que previamente hemos enharinado, para que no se bajen al fondo del bizcocho) y espolvoreamos con un poquito de canela (es más para darle color que por su sabor o aroma).
  5. El horno debemos encenderlo con tiempo suficiente para que alcance la temperatura idónea, unos 15 minutos dependiendo del horno y de la temperatura que se necesite, lo precalentaremos a 190º C. El tiempo de horneado lógicamente varía dependiendo del grosor y tamaño que nos dará el molde que usemos, lo mejor es usar el típico de plum cake. Lo horneamos a 170º C durante unos 45 minutos con calor arriba y abajo, en la rejilla que esté a media altura para que el calor sea uniforme, así no se calentará en exceso la base. Si no tienes rejilla usa la bandeja. No debemos abrir el horno hasta que no esté bien subido y dorado el bizcocho.
  6. Si queréis que os quede con una costra dulce, cuando el bizcocho lleve 1/2 hora echamos dos cucharadas de azúcar por las grietas de la superficie (que se forman cuando rompe al subir) y dejamos el otro cuarto de hora en el horno con la cocción normal.
  7. Una vez fuera del horno tened la precaución de no quemaros. Dejad que el molde se temple un poco, sacudidlo con cuidado para ayudar a que se separe de las paredes, desmoldadlo y ponedlo sobre una rejilla a que se enfríe. Una vez esté totalmente frío el bizcocho podemos ponerlo sobre en un plato o bandeja y meterlo en una bolsa apta para alimentos, cuidando que quede bien cerrada para conservarlo por más días y que no se quede seco